Durante 25 años ocupó la dirección de tres hoteles emblemáticos del sur de la Isla. Inauguró el Conquistador y el Costa Adeje Palace, y dirigió en los últimos años de su carrera el Gran Tinerfe. En 2011 lo fichó José Miguel Rodríguez Fraga como independiente en su lista municipal y fue concejal de Turismo de Adeje hasta el 2015. “Creo que hicimos una buena labor, formamos un gran equipo, pero me costaba asimilar el método público viniendo desde la empresa privada, y no me veía más allá de esos cuatro años”. Ahora, jubilado, asume la presidencia del Centro de Iniciativas y Turismo del Sur de Tenerife, con el objetivo de intentar recuperar el protagonismo que ha perdido esta institución con el paso de los años.
-Desde el 9 de junio ocupa el cargo de presidente del CIT del Sur, una asociación que, además, cumple este año su 50 aniversario.
“Sí, María Nieves Rosales, ha estado los últimos 10 años al frente y ahora me toca a mí coincidiendo con ese medio siglo desde su fundación. Ya fui presidente entre 1992 y 1995 y recuerdo que tuve que dejarlo porque era una época donde había ciertos enfrentamientos con algunos ayuntamientos”.
-El CIT ha atravesado diferentes etapas, pero da la impresión de que el protagonismo actual tiene poco que ver con el que llegó a tener en los años 80 y 90. ¿Por qué ha perdido fuelle?
“Cuando se creó el CIT no existían concejalías de Turismo en los ayuntamientos. Se empezaron a crear con el auge del sector en el Sur y fueron ganando cada vez más peso en estas instituciones. Paralelamente el Cabildo fue reforzando su política turística dejando atrás aquel patronato de promociones para crear la entidad Turismo de Tenerife”.
-¿Y ahora, obligados por las circunstancias a reinventarse, qué papel le corresponde al CIT del Sur?
“Nuestra función principal está dirigida a asesorar a organismos de la Administración Pública y sociedades. Sin ánimo de demandar subvenciones a los ayuntamientos, porque el CIT vive de los asociados entre los que se están hoteles y parques temáticos, nos ofrecemos a los alcaldes y concejales para firmar convenios de colaboración, por ejemplo para hacer campañas de turismo interior. También queremos formular iniciativas a las entidades privadas para garantizar unos parámetros de calidad como destino y ayudar a difundir el conocimiento de nuestra cultura. También estaremos ahí para colaborar en toda clase de eventos turísticos, artísticos, deportivos y festivos. Y, por último, queremos abrir la oficina a la calle”.
-¿Hay alguna acción en la que participe el CIT que destacaría especialmente?
“Tenemos un convenio con el Cabildo, en el que también participan el resto de centros de la Isla, llamada Amabilidad escolar, el turismo tu futuro orientada a estudiantes. En el último curso hemos movido a 5.800 niños, de entre 7 y 12 años, que han visitado hoteles, parques temáticos y el aeropuerto, donde se les ha explicado el valor que representan los turistas que nos visitan. La intención es ampliar esa campaña este año a la Universidad y a los mayores. El Cabildo aportará material específico, con comics para los niños y vídeos para los adultos. Tenemos que hacer ver que el turista ya no es guiri ni viene a molestar. Sigue siendo el futuro”.
-Deducimos, por tanto, que uno de los objetivos principales que se marca al frente del CIT es intentar recuperar un poco más de peso social e institucional.
“Sí, queremos reactivarlo dándolo a conocer a más e implicando a más gente. Esta es una asociación no lucrativa en la que quienes nos dedicamos a ella no cobramos y que se marca como objetivo mejorar las cosas, empezando por las relaciones con los ayuntamientos”.
-En ese sentido, ha mantenido una primera ronda de contactos con los alcaldes de la comarca. ¿Qué predisposición ha encontrado?
“Buena. Tengo la suerte de que me conocen por mi pasado en los hoteles y los cuatro años que estuve de concejal en Adeje. Todos estamos en la misma clave de aportar nuestro granito de arena para ayudar a resurgir al CIT”.
-Como hombre vinculado al turismo desde hace muchos años, ¿qué análisis hace del momento actual del sector en el sur de la Isla?
“El turismo en el Sur ha cambiado muchísimo. Ahora tenemos un período de bonanza en cuanto a ocupación. El futuro pasa por la calidad y en ese sentido es una buena noticia que el próximo año se vayan a inaugurar varios hoteles de cinco estrellas en Costa Adeje, como el Victoria o el Barceló y que en la zona del Puertito haya un proyecto de urbanización de tres o cuatro hoteles de lujo, además de una urbanización con parques y paseos”.
-Una de las grandes claves del éxito de una isla como Tenerife es el alto nivel que turistas que repiten.
“Hay una fidelización de clientela muy importante. Incluso el mercado francés que nunca ha sido muy destacado en el Sur, en los últimos tres o cuatro años se están detectando casos de retornos a la Isla. Es un mercado con un potencial importante que está descubriendo esta zona de Tenerife. Debemos seguir pensando en nuevos países”.
-¿El Brexit cuánto nos puede perjudicar?
“Influirá algo. Si ahora representa el 34% de los visitantes podría bajar por debajo del 30%. Esa pequeña desviación debe ser aprovechada por nuevos mercados que ahora no pueden entrar porque no hay camas”.
-¿Y qué debilidades como destino destacaría en el Sur?
“Yo diría que la formación, aunque es verdad que cada vez hay más empresas sensibles a la preparación de sus empleados. Tampoco nos hemos mentalizado de la importancia de los idiomas ni en los hoteles ni en la calle. Deberíamos ser al menos bilingües”.
-Cuando nació el CIT del Sur, hace ahora 50 años, el Puerto de la Cruz comenzaba a ser la gran referencia con su despegue turístico. Quién diría que medio siglo después lo que entonces era un de- sierto atraería a cuatro millones de turistas al año…
“Yo llegué al Sur en 1985 y el boom había empezado un par de años antes. Entre el hotel Conquistador y el Gran Tinerfe no había calle, sino un camino de tierra. Es que no había prácticamente nada, ni colegios ni infraestructuras de ningún tipo. Los empresarios y los profesionales que no creyeron en el Sur y se quedaron en el Norte se equivocaron y se habrán tirado de los pelos”.
Fuente: Diario de Avisos
